
En las últimas horas, y a causa de los perjuicios ocasionados por la Dana al transporte por carretera, al haber afectado este fenómeno meteorológico a las principales carreteras de la Comunidad Valencia y parte de Castilla – La Mancha (especialmente la A-3, que une la Comunidad Valenciana con la Comunidad de Madrid, y la A-7, que discurre por todo el corredor mediterráneo), se prevé la emisión de una Resolución por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, por la que se establezcan excepciones temporales al cumplimiento de las normas relativas a los tiempos de conducción y descanso en los transportes de mercancías.
Miles de camiones afectados siguen, bien atrapados en las carreteras, o bien han sido trasladados a polígonos industriales donde permanecerán hasta que sea posible restablecer la circulación, por lo que parte de la actividad de transporte en la zona se ve paralizada temporalmente.
Entretanto, y en previsión del establecimiento de estas exenciones temporales, recordar que para la aplicación de la excepción recogida en el artículo 12 del Reglamento (CE) 561/2006, en estos casos de situación excepcional sobrevenida, y en los que se permite apartarse del cumplimiento de lo establecido sobre tiempos de conducción y descanso, siempre y cuando no se comprometa la seguridad de las personas, del vehículo y de su carga, es requisito imprescindible que el conductor anote manualmente, bien en un ticket impreso, bien en el disco diagrama, la circunstancia concreta que le impide cumplir con los tiempos de conducción y descanso, bien durante la marcha, bien en el momento de llegada al punto de parada adecuado.
Asimismo, recordar las recomendaciones emitidas por la CETM (Confederación Española de Transporte de Mercancías), en caso de inundaciones o riadas:
Nuestro reconocimiento a la labor que muchos transportistas que, encontrándose en la zona afectada por este fenómeno meteorológico, han colaborado en las tareas de rescate de personas atrapadas a consecuencia de las inundaciones.
Miles de camiones afectados siguen, bien atrapados en las carreteras, o bien han sido trasladados a polígonos industriales donde permanecerán hasta que sea posible restablecer la circulación, por lo que parte de la actividad de transporte en la zona se ve paralizada temporalmente.
Entretanto, y en previsión del establecimiento de estas exenciones temporales, recordar que para la aplicación de la excepción recogida en el artículo 12 del Reglamento (CE) 561/2006, en estos casos de situación excepcional sobrevenida, y en los que se permite apartarse del cumplimiento de lo establecido sobre tiempos de conducción y descanso, siempre y cuando no se comprometa la seguridad de las personas, del vehículo y de su carga, es requisito imprescindible que el conductor anote manualmente, bien en un ticket impreso, bien en el disco diagrama, la circunstancia concreta que le impide cumplir con los tiempos de conducción y descanso, bien durante la marcha, bien en el momento de llegada al punto de parada adecuado.
Asimismo, recordar las recomendaciones emitidas por la CETM (Confederación Española de Transporte de Mercancías), en caso de inundaciones o riadas:
- No atravesar zonas inundadas. Aunque el nivel de agua parezca poco profundo, puede ser peligroso. Es recomendable dar la vuelta y buscar rutas alternativas.
- Mantener la calma y reducir la velocidad. Si no es posible parar de forma inmediata, hay que reducir la velocidad para evitar levantar olas, y usar marchas bajas para un mejor control del vehículo.
- Llamar al 112 en caso de emergencia, y proporcionar nuestra ubicación exacta para facilitar su llegada de la forma más inmediata posible.
- Buscar un lugar elevado. Hay que intentar acceder a una zona elevada, y esperar a que la situación se estabilice o a la llegada de los servicios de emergencias.
- No abandonar el vehículo en movimiento de agua rápida. Hacerlo sólo si es seguro, y el nivel de agua es bajo.
- Mantenernos informados. Estar atentos a las alertas tanto de la AEMET como de la Dirección General de Tráfico, y las instrucciones de las autoridades locales, y seguir siempre las recomendaciones transmitidas.
- La seguridad, lo primero. Hay que priorizar la seguridad de los conductores, ante todo.
Nuestro reconocimiento a la labor que muchos transportistas que, encontrándose en la zona afectada por este fenómeno meteorológico, han colaborado en las tareas de rescate de personas atrapadas a consecuencia de las inundaciones.